Cinco conclusiones de la Conferencia Anual de la NABSA de 2021

La Conferencia NABSA es una conferencia anual de dos días de duración organizada por la Asociación norteamericana de bicicletas, y motocicletas compartidas (NABSA). La NABSA reúne a los principales actores del mercado de la micromovilidad en todo el mundo, líderes de las bicicletas, y motocicletas compartidas, del transporte, promotores, operadores y proveedores de equipos, para hablar sobre la industria de la micromovilidad compartida, sus desafíos, sus éxitos y su futuro. El objetivo es compartir, aprender e inspirar a través de diferentes temas con el fin de desarrollar juntos el futuro de la micromovilidad compartida.   
  
Este año, la conferencia ha tenido lugar de forma virtual y se han desarrollado distintas sesiones interactivas. Se han puesto sobre la mesa muchos temas de distintos ámbitos para mejorar el futuro de la industria. Así que, si te lo perdiste, aquí tienes un resumen de los cinco puntos más importantes de esta edición de 2021, según PBSC.  

¿Qué retos tiene por delante la implantación del transporte sostenible?

El cambio climático está en el centro del debate, especialmente en el ámbito del transporte, ya que es uno de los sectores más contaminantes. En una de las sesiones conocimos que la movilidad personal representa aproximadamente el 17% de las emisiones mundiales. Por ello, muchas ciudades deben replantearse las infraestructuras y actuar para reducir el uso personal del automóvil. Las ayudas públicas serán cruciales para impulsar un cambio real y duradero en las ciudades.

 
Sin embargo, la sostenibilidad no consiste únicamente en ir en bicicleta, motocicleta o patinete compartido. Las empresas deben pensar en todo el ciclo de vida de su producto. ¿Cómo podemos producir de forma más sostenible? ¿Cómo podemos maximizar la duración de nuestras baterías? Reciclaje, reutilización, economía circular y energía renovable han sido temas recurrentes. Se destacó el delicado asunto del impacto medioambiental de las baterías, especialmente debido al ion-litio, aún de difícil reciclaje. Todos los actores de la industria de la micromovilidad están abordando con prontitud esta preocupación y buscando formas de mejorar el reciclaje y la reutilización de los materiales. En numerosas partes del mundo, los proveedores de sistemas de bicicletas compartidas, como PBSC, se asocian con organizaciones locales que garantizan que las baterías no acaben en los vertederos. 
  
 El acoplamiento y la carga son temas de rabiosa actualidad en el sector. ¿Cómo podemos cargar de forma más sostenible? ¿Cómo pueden trabajar varios operadores de forma cohesionada en ciudades donde la micromovilidad es prominente? Mientras, el socio de PBSC, WE-CYCLE, celebra el éxito del primer año de nuestro proyecto piloto conjunto de carga sostenible, junto con Skyhook Solar, en el que han conseguido una carga solar del 100% para sus flotas de bicicletas eléctricas. Esto es sólo el principio: la carga solar podría ser el colosal siguiente paso para lograr una verdadera sostenibilidad en la micromovilidad. 

¿Cuáles son los impactos de la micromovilidad compartida en la equidad social?

Cada ciudad es única en lo que a sus habitantes, su organización, su composición socioeconómica y muchos otros factores se refiere. Las empresas tienen que cambiar su forma de pensar de una ciudad a otra para adaptar sus servicios a cada una de ellas. Cada empresa de micromovilidad compartida desempeña a través de la prestación de sus servicios un papel relevante en la mejora de la equidad de género, social, racial o la inclusividad. ¿Cómo pueden los proveedores, los operadores y las ciudades proporcionar un acceso equitativo y más inclusivo a los servicios de micromovilidad compartida? ¿Cuáles son los retos y problemas en los que debe trabajar el sector?
 
La micromovilidad compartida es un sector joven que sigue adaptándose y evolucionando a medida que se expande por más ciudades del mundo. Cada ciudad, junto con los proveedores y operadores del sistema, tendrá un importante papel a la hora de ofrecer un servicio adecuado e inclusivo: ¿Cómo se puede facilitar el acceso a todo el mundo a las estaciones en las grandes ciudades? ¿Qué tipos de vehículos pueden adaptarse a todo tipo de cuerpos y capacidades? ¿Dónde están los usuarios y los no usuarios y cuáles son los obstáculos que se encuentran los no usuarios?  ¿Cómo podemos mejorar la igualdad de género fomentando el acceso seguro de todas las mujeres a los servicios? Y muchos más retos.
 
Para abordar estos retos, debemos trabajar en cooperación con las ciudades. Nuestro socio en Guadalajara, Mibici, anunció durante la conferencia que en 2021 un 54,47% de los usuarios de su sistema de bicicletas compartidas fueron mujeres, frente a un 45,53% de hombres. Un récord que demuestra que es posible avanzar hacia un futuro mejor y más inclusivo. 

* Datos presentados por BKT bici pública en el panel: Impactos de la micromovilidad compartida en la equidad social

¿Cuáles son las repercusiones de la electrificación en la movilidad compartida?

 "El futuro es eléctrico" es lo que escuchamos hoy en día. La electrificación en la movilidad compartida está creciendo en todo el mundo y aparece como la solución para alcanzar el transporte sostenible. Por ello, las empresas juegan un papel en la electrificación de la micromovilidad. Las ciudades quieren electrificar sus estaciones y programas de bicicletas compartidas y esto supone una transición con requisitos técnicos y operativos y el desarrollo de nuevas tecnologías. De hecho, las e-bikes y las e-scooters tienen procesos diferentes. ¿Cómo pueden las empresas desarrollar y adaptar su tecnología y cómo pueden las ciudades hacer la transición a esta nueva tecnología? ¿Qué pasa con las baterías? ¿Cómo cargar o intercambiar las baterías de forma eficiente? ¿Qué método de carga funciona mejor para el ciclo de vida de la batería y es el más sostenible?

 Desde el punto de vista del usuario: la gente tiene que adoptar este nuevo tipo de movilidad. ¿Cómo pueden las empresas cambiar la cultura? ¿Cómo pueden las industrias electrificar las flotas y mejorar la experiencia del usuario? Además, las e-bikes se utilizan de forma diferente, la gente hace viajes mucho más largos con una e-bike que con una bicicleta normal. Este es un reto adicional al que se enfrentan las empresas, debemos replantear nuestra estrategia y adaptarnos a estos cambios.

Por último, como hemos comentado, con la electrificación surgen retos medioambientales con el consumo y la eliminación de las baterías, especialmente con su reciclaje.
 
Pero es posible desarrollar un transporte electrificado y sostenible. Por ejemplo, Gian Carlo Crivello, CRO de PBSC, presentó la carga con energía solar, un proyecto acometido por PBSC. Se trata de una de las primeras estaciones de carga de bicicletas con energía solar del mundo, situada en Aspen (Colorado). El piloto ha sido un éxito y el proyecto se ampliará pronto.

¿Cómo serán los centros de movilidad del mañana?

Al repensar sus sistemas de micromovilidad compartida, los proveedores y operadores ha de tener en cuenta la visión tras los hubs de movilidad. Cada ciudad es diferente y tiene su propia identidad. Las empresas tienen que adaptarse a estas identidades y encontrar una mejor manera de colaborar con las ciudades para ofrecer mejores servicios, más adaptados y convenientes para los usuarios. ¿Cómo se pueden integrar los programas de bicicletas compartidas y los centros de movilidad con estaciones de carga y quioscos con las redes de transporte público? ¿Qué tipo de centros de movilidad podemos esperar para las zonas urbanas del futuro?

Para algunos proveedores y operadores de bicicletas compartidas, lo ideal sería que el transporte público fuera un servicio y las bicicletas compartidas una extensión de ese servicio, lo que significa una ubicación centralizada para todos los vehículos compartidos, para recogerlos y devolverlos, y para recargar las baterías de los vehículos eléctricos. El reto es desarrollar una tecnología que se integre en este transporte público y que funcione de la misma manera (app, suscripción). Además, aparece otro reto con los centros de movilidad: ¿qué tipo de solución de recarga y estaciones debemos ofrecer? Lo que está en juego es tener una carga universal para que se adapte a los diferentes vehículos. ¿Qué tipo de conectores y baterías?

PBSC ha desarrollado una solución multimodal para ayudar a las ciudades a estar más organizadas. Es una estación inteligente que puede albergar varios e-scooters en las estaciones junto con nuestras bicicletas. Es un ejemplo de los centros de movilidad del futuro que pueden desarrollarse en las ciudades.

Qué datos conocemos del sector: Estadísticas y cifras del uso compartido de la bicicleta

Los datos sobre movilidad son fundamentales para construir mejores ecosistemas de transporte. Ayudan a evaluar las decisiones técnicas y políticas de las organizaciones, pero deben utilizarse de forma responsable. Es importante proteger la privacidad individual, como por ejemplo la información sobre los movimientos de los usuarios. Las ciudades, los proveedores de soluciones y los operadores tienen sus propios conjuntos de datos y están empezando a compartirlos entre ellos. Pero ¿cómo podemos conciliar la necesidad de recopilar datos con la privacidad de los usuarios? ¿De qué forma podemos proteger la privacidad y compartir los datos de movilidad?

El sector es joven, por lo que todavía existen muchas lagunas en el tratamiento de los datos. Cada vez más gobiernos y personas empiezan a preguntarse cómo se manejan sus datos, especialmente por parte de las empresas privadas de micromovilidad que operan al margen del gobierno de la ciudad. ¿Cuál debe ser el proceso de intercambio de datos y cuántos datos necesitan exactamente las empresas de micromovilidad? Se trata de cuestiones importantes de cara al futuro, ya que el sector empieza a evolucionar en torno a las leyes de privacidad de las distintas ciudades, sobre todo si se tiene en cuenta lo cruciales que son los datos para la toma de decisiones en las ciudades en función del impacto de los sistemas de micromovilidad que operan en sus calles.
 
De hecho, un grupo de ciudades y empresas de micromovilidad acordaron recientemente siete directrices para mantener la privacidad de los datos de los usuarios. Este hecho pone de manifiesto la implicación de las organizaciones en la mejora de la protección de los datos de los usuarios.Estas directrices son el resultado de la colaboración de más de 20 ciudades, defensores de la privacidad, proveedores de servicios de movilidad y organizaciones como New Urban Mobility Alliance, Open Mobility Foundation y NABSA.
 
Como podéis ver, la conferencia de este año estuvo repleta de interesantes ponentes y sesiones con interesantes reflexiones sobre los retos del sector de la micromovilidad. Numerosas empresas compartieron sus descubrimientos y experiencias para ayudar a mejorar el mercado. ¡Gracias a NABSA por organizar esta conferencia!
 
¡Nos vemos el próximo año para la Conferencia NABSA 2022 en Guadalajara!

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